Danel Castro y la pequeña compañía
Danel Castro, la historia y un swing que no se detiene.
Estoy seguro de que Danel Castro no celebró como habría querido su entrada al Club de los bateadores con al menos 2,300 hits en la historia de las Series Nacionales del béisbol cubano.
La razón es obvia, porque involucra más sus intereses colectivos que personales: Los Leñadores de Las Tunas perdieron una ventaja de 6-1 en el último tercio del juego de este sábado, admitiendo 11 carreras (cinco en el séptimo y seis en el octavo) ante los Indios de Guantánamo, que provocaron un revés del equipo, 12-7. La mitad de las anotaciones por los Indios fueron sucias, pero válidas para enviar a Las Tunas hasta el lugar trece de la tabla de posiciones, con marca de 5-9.
Aun cuando Danel Castro sigue acercándose al récord de 2,378 hits de Enrique Díaz, su enfoque se mantiene en contribuir como sea posible para lograr cada éxito de los Leñadores. Luego de irse este sábado de 5-2, con par de sencillos y una carrera anotada, el ídolo del municipio tunero de Manatí está promediando línea de .320/.477/.520 (.997 OPS). Además, acumula un doble, tres jonrones, nueve remolcadas, 14 boletos y solo cuatro ponches, un rendimiento que parece surreal cuando escuchas esto: Danel Castro cumplirá 46 años el próximo 2 de julio.
¡Increíble!... ¡pero cierto! Cuando vio el primer pitcheo del diestro Yander Guevara durante el Opening Day el pasado martes 25 de enero, Danel Castro se convirtió oficialmente en el segundo pelotero cubano con participación en 28 Series Nacionales (1962-2022), y hasta el momento el primer y único bateador, ya que el récord le pertenecía al ex lanzador de los Piratas de la Isla, Carlos Yanes. Sin embargo, la gran historia aquí va más allá de simplemente acumular el casi inalcanzable registro de 28 campañas jugadas, porque en el caso de Danel, cada año ha sido bien aprovechado.
Una de las principales razones por las que el incansable bateador designado de los Leñadores merece total admiración, es la consistencia extendida durante toda su carrera. Como muchos creen—entre los que me incluyo—, el nivel del pitcheo en la liga ha decaído considerablemente durante la última década, pero Danel Castro ha demostrado su grandeza a lo largo de los años.
Así pues, la tarde de este sábado fue otra de esas jornadas donde la conexión que vemos viajar hasta el outfield como un simple sencillo, trasciende a niveles sorprendentes: Danel Castro se unió a un Club que podríamos llamar “la pequeña compañía”.
¿De quiénes se trata? Los únicos bateadores en la historia de las Series Nacionales, que acumulan al menos 2,300 hits, 1000 carreras anotadas y se han embasado (por la combinación de hit, boleto o dead ball) 3,000 o más veces:
-Antonio Pacheco: 2,356 hits, 3,170 OB (veces embasado) y 1,258 carreras anotadas
-Enrique Díaz: 2,378 hits, 3,984 OB (veces embasado) y 1,638 carreras anotadas
-Danel Castro: 2,300 hits, 3,427 OB (veces embasado) y 1,287 carreras anotadas
¡Sí, qué grandioso trío de bateadores! Pacheco, quien indudablemente ha sido uno de los peloteros más completos en la historia de las Series Nacionales y, además, un manager exitoso. Luego, tenemos a Enrique Díaz, el “Rey de las bases robadas” en la pelota cubana, y dueño de múltiples récords gracias a su virtuosa velocidad para volar sobre las almohadillas. Pacheco se retiró del deporte activo en 2002, Enrique Díaz una década después, pero Danel, quien coincidió varios años con ambos, sigue siendo el ilustre miembro activo de “la pequeña compañía”.
Y, bueno, ya sabes: eso quiere decir que habrá muchas más historias protagonizadas por ese giro de muñecas imparable de Danel Castro, desatando un swing que está a sólo 79 hits de convertir al ilustre bateador designado tunero en el recordista de todos los tiempos.
¿Lo logrará en esta temporada, a los 45 años? ¿O tendrá que jugar un año más? Sí, ahora solo queda esperar, aunque ya podemos asegurar que aún seguirá sonando el madero de uno de los legendarios miembros de “la pequeña compañía”.
(Foto: Danel Castro/Calixto N. Llanes)
Danel Castro is my new hero in Cuban baseball. Still playing at 45.! This is a great story about a great career. And Yirsandy gave us a really nifty phrase in this: "Half of the Indians' scoring was dirty..." But we all know those "dirty" runs count the same as "clean" ones. Baseball -- what a game!