Granma vs. Matanzas: Las claves para cada equipo en busca del título nacional
Por segundo año consecutivo, Matanzas y Granma se enfrentarán en la final de la Serie Nacional cubana.
Por Yirsandy Rodríguez | Especial para Play-Off Magazine
En el juego número 74 de la temporada regular, los Cocodrilos de Matanzas tenían cualquier perspectiva menos discutir el título nacional por tercer año consecutivo, y segundo ante los Alazanes de Granma. La razón era obvia: los dirigidos por Armando Ferrer buscaban su clasificación a los playoffs. Por su parte, los Alazanes, que se ganaron el boleto a la postemporada sin preocupaciones, simplemente esperaban a sus rivales.
Una vez dentro de los playoffs, entonces las perspectivas comenzaron a cambiar. Los Cocodrilos volvieron a ser verdugos ante los Leñadores de Las Tunas, y los Alazanes casi barrían a los Leones, eliminándolos también por segundo año en fila.
Cuando ambos equipos llegaron a la Semifinal, se sentía con más fuerza la superioridad de las dos selecciones que discutieron el título el año pasado. Así pues, se repite la historia de rivalidades entre Alazanes y Cocodrilos, una serie de playoffs que los actuales campeones lideran 3-0.
¿Quién ganará este año? ¿Cuáles son las fortalezas y debilidades que definirán el camino hasta el título? He aquí un análisis detallado del choque de fuerzas entre los Alazanes de Granma y los Cocodrilos de Matanzas:
Cocodrilos de Matanzas
Análisis de fortalezas y debilidades
Bateadores: El gran poder de la alineación en todos los sentidos se encuentra entre los bateadores del primero al sexto turno. Yadil Mujica, Jefferson Delgado, Ariel Sánchez, Erisbel Arruebarena, Yariel Duque y Javier Camero, se han combinado para producir el 78.9% (15 de 19) de los extra bases y 82% en remolques (36 de 44) del equipo en estos playoffs, respectivamente.*
*No lo he olvidado. He aquí el otro lado de la tarjeta de alineación de Ferrer: Juan Miguel Vázquez, Roberto Loredo y Yoisnel Camejo se combinan para promedio de .212 en esta postemporada, con 18 strikeouts recibidos y apenas seis boletos.
Sí, no es nada fácil cruzar ese lineup dos, tres o cuatro veces sin varios turnos exigentes donde habrá presión para pícheres y bateadores. Pero, obviamente, mientras los picheos estén dotados de buen comando, combinado con rotación y velocidad, la ofensiva de los Cocodrilos podría ser limitada. Ha sucedido en esta postemporada, sobre todo en los primeros partidos de Matanzas luego de cada descanso prolongado. A excepción de Mujica, todos los demás bateadores antes mencionados se destacan más por su habilidad en la caja de bateo que corriendo en las bases*.
*No estoy descartando a Yadir Drake, quien se robó ocho bases en nueve intentos durante la temporada regular, pero las posibilidades de que juegue están limitadas a un solo partido.
Matanzas sigue siendo uno de los equipos que más batea para double play, y el picheo de los Alazanes se ha especializado en dominar las zonas bajas y lanzar strikes en las esquinas para producir conexiones de rollings. Cada turno de Erisbel Arruebarena será clave incluso cuando no encuentre corredores en bases, porque es ampliamente el bateador con más poder en el lineup de los Cocodrilos. Quizás los Alazanes sean más cuidadosos en retarlo, dependiendo de las expectativas situacionales del juego, y tienen otro gran argumento a su favor: detrás de “El Grillo”, la mayoría de las veces batea Yariel Duque o Javier Camero, par de bateadores que han registrado cifra combinada de 31 rodados para doble matanza. Sí, también hay margen de error en ese sentido: Camero lidera el equipo con 19 carreras que han proporcionado el empate o la ventaja para los Cocodrilos en este 2022, y promedia un 28.4% de corredores impulsados desde posición anotadora. ¿El resto del equipo? Apenas 24.0%.
Corredores: La picardía y experiencia de varios jugadores en playoffs, será el valor agregado para unos Cocodrilos que esta vez poseen más astucia que corredores veloces entre las bases. Sin embargo, los robadores del equipo han sido Mujica (11 en 17 intentos, 64.7%) y Drake (8 en 9, 88.8%). Camejo no tiene intentos de robos registrados, y el dúo Jefferson-Arruebarena ha sido puesto out en las cuatro veces que intentaron robar. Para presionar la eficiente defensiva de los Alazanes, los Cocodrilos necesitan ser agresivos y certeros en las bases.
Suplentes: Probablemente Andrys Pérez regrese del Pre-Mundial Sub-23 antes de que el playoff termine. William Luis y el prospecto Ronney Muñiz también podrían ser emergentes en situaciones claves para Ferrer, aunque lo más probable es que los lineups titulares sean casi inamovibles. Edel Tamayo es uno de los principales corredores emergentes del equipo, y Roberto Acea podría reforzar la defensiva. A diferencia de otros años, los Cocodrilos no cuentan con tantos suplentes de calidad, otro reflejo de lo mucho que les han afectado las múltiples bajas durante toda la temporada.
Formación defensiva: Tienen la combinación más espectacular de “short-segunda” con la profesionalidad de Arruebarena y Mujica. Jefferson ha jugado en tercera base solo el 40% de los innings del equipo, sobre todo tras la partida del torpedero Julio César González. Junto a Jefferson, los outfielders Juan Miguel Vázquez y Ariel Sánchez o William Luis, sin dudas tendrán un alto reto ante la agresividad de los Alazanes en las bases.
Rotación de abridores: En la cuenta de Facebook de los Cocodrilos, se anunció que el diestro Renner Rivero será el primer abridor del equipo en esta final ante Granma. La rotación de Ferrer cuenta además con los zurdos Dariel Góngora y Yamichel Pérez, quienes probablemente se roten la apertura del Juego 2 o un relevo relámpago en el Juego 1. Tampoco descartamos al veterano diestro Noelvis Entenza, quien se llevó la mitad de los éxitos del equipo en Semifinales contra Sancti Spíritus. Es una rotación con experiencia, y la durabilidad en cada partido será la clave que espera Ferrer.
Bullpen: La ventaja que sigo viendo aquí para los Alazanes, es la restructuración de su bullpen. No es que esa sea una situación devastadora para los Cocodrilos, quienes probablemente tengan de regreso al zurdo Naykel Yoel Cruz. Pero el plan de combinar a varios de sus abridores día a día como relevistas, les salió bien par de veces ante Leñadores y Gallos. ¿Se repetirá la historia? ¿Volverán a ser suficientes cuatro brazos para ganar el título? La respuesta a cada una de esas dudas las veremos a partir de que se escuche la voz de playball este viernes.
Alazanes de Granma
Análisis de fortalezas y debilidades
Bateadores: Los Alazanes aún tienen la ofensiva más balanceada y lo han demostrado durante estos playoffs. El índice de 6.6 carreras anotadas por partido revela el éxito de la producción combinada entre bateo de contacto, poder ocasional, disciplina en el plato y un alto enfoque para remolcar en situaciones de clutch. En nueve juegos, lideran esta postemporada con 10 jonrones, 54 bases por bolas recibidas, .424 OBP y .888 OPS. ¿Qué significan esos números en el actual contexto de los playoffs? La capacidad de un equipo al que ningún rival lo ha podido detener, y esa filosofía de trabajar la cuenta contra los lanzadores, podría influir para sofocar el bullpen de los Cocodrilos.
El desafío contra los lanzadores de Matanzas será interesante, pues cuentan con una de las rotaciones de abridores más dominantes durante esta postemporada. Por esa razón, en cualquier caso, la misión fundamental para Granma será explotar a los abridores, situación que comprometería el bullpen. Otro punto real a resaltar, es que los Alazanes se han beneficiado de su disciplina en el plato y, obviamente, el descontrol de los lanzadores contrarios. Pero unido a ese resultado, también es justo señalar que la mayoría de los bateadores granmenses han sabido trabajar los conteos y presionar a sus oponentes.
El torpedero Yulian Milán, es el único titular con más ponches que boletos (apenas dos strikeouts y una base por bolas), pero acumula 11 hits y un excelente 30.7% de corredores impulsados en posición anotadora. Para los lanzadores de los Cocodrilos, la realidad es que, en cuanto a habilidad de contacto, los titulares en el lineup de los Alazanes han demostrado consistencia. También la velocidad juega un papel importante en la fórmula ofensiva granmense. Varias conexiones podrían ser aprovechadas por la velocidad que desatan los Alazanes sobre las almohadillas, habilidad que exigirá otro gran trabajo defensivo de Matanzas.*
*Los Cocodrilos promediaron un porcentaje de fildeo combinado de .992 (y 15 dobles jugadas realizadas) contra Las Tunas y Sancti Spíritus.
Entonces, el reto va más allá de los números. Para el picheo matancero, será evitar que los Alazanes continúen produciendo carreras, quizás con un rolling hacia la banda opuesta, un elevado de sacrificio, una base robada o una de esas galopadas donde múltiples corredores logran alcanzar una almohadilla más. Está claro que Guillermo Avilés, Carlos Benítez, Iván Prieto y Lázaro Cedeño cuentan con el poder suficiente para destruir errores de comando en sus zonas “calientes”, pero si algo ha demostrado el lineup de los Alazanes, es la manera de encontrar cómo remolcar cada carrera cuando tienen posibilidades. Desde luego, ese empuje, el extra de los campeones, no aparece en ninguna estadística. Así que, para vencer a los Alazanes, Matanzas deberá imponerse técnica y tácticamente de principio a fin, porque los actuales campeones nunca se dan por vencidos.
Corredores: ¿Velocidad? Los Alazanes cuentan con un quinto bate, el cátcher Iván Prieto, que ha robado cuatro bases en cinco intentos durante estos playoffs: Matanzas ha robado dos, tras arriesgarse en igual número de intentos. Pero el potencial de los Alazanes, ahora sin Roel y Raico Santos, se enfoca más en las jugadas de “corrido y bateo” que en el robo de bases. Obviamente, sin la presencia de Andrys Pérez recibiéndole a los lanzadores matanceros, los Alazanes intentarán presionar un poco más a Roberto Loredo, quien lució una excelente capacidad defensiva durante los cuatro partidos de la Semifinal. A excepción de Carlos Benítez, quien continúa sufriendo lesiones en sus piernas, podemos ver en cada partido la exigencia de Carlos Martí, y cómo los corredores de los Alazanes siempre están intentando sacar provecho entre bases.
Ese será otro complemento en el que la defensa de los Cocodrilos tendrá que trabajar: los toques sorpresas de Osvaldo Abreu, Yulian Milán, Yosbany Millán, Francisco Venecia—cuando se incorpore—e incluso Darien Palma, y la suspicacia para adelantar en bases, pequeños detalles que ayudan a producir carreras. Con Ariel Sánchez en el right field y probablemente Juan Miguel Vázquez en el left, dos veteranos que han perdido potencia en el brazo y desplazamiento, los Alazanes no dejarán de buscar la posibilidad de ganar una almohadilla más.
Suplentes: Durante la Semifinal contra Ciego de Ávila, Martí se dio el lujo de tener a un bateador de poder como Lázaro Cedeño en el dugout, probablemente para turnos especiales. Cedeño bateó de 1-1 y podría contar con más oportunidades ante Matanzas, en una serie que promete juegos menos desproporcionados y más dominio del picheo. Martí también cuenta con Pedro Almeida entre sus suplentes*, quien bateó de 4-3 y remolcó una carrera contra Matanzas en la temporada regular.
*Almeida ha contribuido en cuatro posiciones este año, con 235 innings a la defensiva y un solo error.
Formación defensiva: Durante estos playoffs, el infield de Granma ha sido uno de los más brillantes, con Abreu, Milán, Millán y Avilés de izquierda a derecha. La gran incógnita de los Alazanes, es la utilización de Pedro Almeida en el leftfield, pero si Francisco Venecia regresa a tiempo del Pre-Mundial Sub-23 con sede en Aguascalientes, México, la configuración defensiva del outfield se ajustará. Tanto Venecia como Darien Palma en el centerfield, cuentan con el apoyo defensivo de Alexquemer Sánchez, uno de los jardineros derechos con mejor cobertura defensiva e inigualable potencia en su brazo derecho. Con Iván Prieto en la receptoría, los Alazanes exhiben una línea central (segunda, torpedero y centerfielder) que ha cometido solo dos errores y promedia .986 en estos playoffs.
Rotación de abridores: Ya sabemos que Carlos Martí no guardará lanzadores. Si tuviera que utilizar a Yoel Mojena—su posible abridor del Juego 3—para preservar alguna ventaja como lo hizo en el Juego 2 contra Ciego de Ávila, su presencia en el box será un hecho. Los Alazanes enviarán al montículo a César García este viernes para enfrentar a los Cocodrilos en el Juego 1 de la final. César efectuó una sola apertura contra Matanzas este año, y fue en el Opening Day, donde lanzó seis innings y permitió nueve hits (incluyendo jonrones de Aníbal Medina y Eduardo Blanco) con cuatro carreras limpias. Si agregamos ese impacto a una apertura donde César explotó el año pasado contra Matanzas en la final, entonces acumula 9.31 PCL, con 10 limpias permitidas en 9 ¹/₃ innings.
Leandro Martínez y Yoel Mojena no fueron imponentes, pero ofrecieron durabilidad, otro complemento fundamental para evitar que el bullpen se sobrecargue. El zurdo Yunier Castillo lanzó una joya de picheo durante 5 ⅔ innings, donde sólo cometió un error de comando, y Yadil Dreke lo castigó con un jonrón solitario por el right field del estadio Victoria de Girón el pasado 1ro de marzo.
Bullpen: Con Mojena como primera opción incluso antes de usar su bullpen, Martí tiene disponibles también a los diestros Kelbis Rodríguez y el cerrador Carlos Santana, y al zurdo Miguel Paradelo. Erluis Blanco, quien no permitió carreras durante 4 ⅔ innings en la temporada regular contra Matanzas, no ha podido debutar en estos playoffs. Juan Danilo Pérez aparece como otra opción para un bullpen más balanceado en comparación con el de Matanzas.
Predicción: A los Alazanes de Granma no les será tan fácil atravesar el picheo de los Cocodrilos, pero lograrán producir las carreras suficientes. Como en 2017, la final se decidirá en el estadio Mártires de Barbados, y los Alazanes volverán a triunfar.
(Foto: Oscar Alfonso Sosa/ACN)