¿Quién podrá detenerlos? Esa es la pregunta del momento al apreciar el poderío de los Cocodrilos de Matanzas en esta II Liga Élite del Béisbol Cubano.
Si has seguido el torneo o leíste alguna de mis columnas previas, ya sabes la sensación que invade a los equipos cuando enfrentan a estos Cocodrilos de Matanzas: son casi invencibles. Incluso si no has visto cómo funcionan en el terreno de juego contra los demás equipos de la liga y solo analizas algunos números, parece suficiente para apostar por ellos:
1) La ofensiva es devastadora: son el único equipo con un promedio de bateo sobre .300 (.325) y porcentaje de embasado de .400+ (.405).
2) Han anotado 200 carreras en 33 juegos, registrando un promedio de 6.1 por partido.
3) En una liga donde las rotaciones de abridores están lanzando para efectividad de 4.58, el staff de pitcheo de Matanzas exhibe un impecable 3.71, con una tasa de 2.4 SO/BB. ¿Quién le sigue en esa correlación de strikeouts sobre bases por bolas? Artemisa, con 1.37, el mismo promedio de la liga.
4) Los Cocodrilos también lucen el bullpen más eficaz, y no es precisamente porque estén lanzando para 3.25 ERA. Admiten el OPS (.691) y OBP (.333) más bajos de la liga, aunque la estadística reveladora aquí es el 18 IR% permitido: el brillante índice de corredores heredados que le anotan a los relevistas. Tras terminar los juegos del pasado domingo, el promedio de IR en la liga era de 38%, duplicando negativamente el rendimiento de Matanzas. Sí, la contribución del bullpen de los Cocodrilos ha sido clave para limitar a los oponentes en múltiples situaciones que otros staffs no han podido resolver.
5) No hay otro equipo en la liga que pueda contar con bateadores suplentes como Alexander Pozo, Ariel Sánchez, Yariel Duque, Luis Ángel Sánchez y Moisés Esquerré. Matanzas sí, porque tiene en su plantilla a tres jugadores que llegaron a las Grandes Ligas: Erisbel Arruebarena, quien regresó a las Series Nacionales hace cuatro años, además del avileño Rusney Castillo y el camagüeyano Dariel Álvarez, dos refuerzos de primer nivel que se reinsertaron en esta Liga Élite.
Así que, cuando se trata de comparaciones: los “indestructibles” Cocodrilos de Matanzas sobresalen como favoritos contra cualquier rival en esta Liga Élite, al menos hasta que se demuestre lo contrario.
El juego del pasado domingo contra Santiago de Cuba fue otra reproducción del dominio de los Cocodrilos. Las Avispas picaron primero, anotando par de carreras sucias a la cuenta del zurdo Yamichel Pérez en el primer inning, pero luego el lineup de Matanzas no demoró en reaccionar: anotaron tres carreras en la parte baja de la entrada inicial —explotaron al veterano Dany Betancourt, quien fue bombardeado de 6-5—, y dos más en el segundo capítulo. Luego, el remate llegó en el final de la quinta entrada con un rally de seis carreras, la mitad empujadas por un jonrón de Yurisbel Gracial.*
*En apenas 40 apariciones al plato, Gracial ha remolcado 18 carreras y suma cinco jonrones, promediando una astronómica línea de .412/.500/.912/1.412 contra el endeble pitcheo de la Liga Élite.
Con ventaja por 10-2 en cinco entradas, el desafío no derivó en un nocaut gracias al relevo del diestro santiaguero Yosmel Garcés, quien se acreditó tres ceros consecutivos.
La situación de los ganadores: Los Cocodrilos llegaron a 20 victorias, y en esta subserie podrían asegurar el primer lugar en la tabla de posiciones. Después de recibir dos blanqueadas con 18 ceros de manera consecutiva por el pitcheo de Industriales, la ofensiva volvió a despertar: batearon 20 hits, igualando el récord de Portuarios para un juego en la historia de la Liga Élite, producción que lideraron los primeros cinco bateadores del lineup tras irse de 15-10:
1- Aníbal Medina: 4-2, 3 carreras anotadas
2- Alexander Pozo: 3-2, impulsada y carreras anotada
3- Yurisbel Gracial: 4-3, 3 carreras anotadas, jonrón y 5 remolcadas
4- Yordanis Samón: 4-3, anotada, doble y remolcada
La situación de los perdedores: La derrota volvió a limitar las probabilidades de clasificación de Santiago de Cuba, aunque aún tienen esperanzas. Con marca de 13-20, las Avispas están a tres juegos de Sancti Spíritus y Las Tunas, dos de los contendientes más cercanos que tienen. Sin embargo, de ser así, las aspiraciones quedarían en un posible escenario de eliminación contra los Leñadores. ¿La razón? Santiago de Cuba perdió la serie por 6-2 contra los Gallos.
Sí, sé que el match quedó igualado 4-4 ante Las Tunas, pero las Avispas cerraron con ventaja en carreras anotadas, 46 por 31. Por supuesto, ninguno de estos cálculos favorecerá a Santiago de Cuba si no pueden obtener al menos dos victorias en los siguientes tres partidos frente a Matanzas.
De cualquier manera, aunque las Avispas han perdido nueve de sus 11 decisiones como visitantes, seguiremos actualizando las probabilidades de clasificación a la postemporada. Santiago de Cuba terminará la temporada regular enfrentando a Industriales, otro de los contendientes que está intentando avanzar.