Hace exactamente 100 días, Industriales terminaba el primer tercio de esta 62 Serie Nacional en el último lugar de la tabla de posiciones con marca de 8-17.
La 17ma derrota fue el domingo 23 de abril contra las Avispas de Santiago de Cuba, con marcador de 6-2 en 10 entradas. El lanzador perdedor fue Raymond Figueredo, quien atravesaba por un inconsistente inicio de temporada donde llegó a perder su puesto en la rotación de abridores. Aquella tarde, Raymond lanzó sus primeros tres ceros consecutivos del año con siete strikeouts que superaron sus actuaciones anteriores durante el primer tercio de la temporada.
Después de aquel desconcertante inicio, una debacle sin precedentes parecía el destino más probable para los Industriales, pero la historia dio un impresionante giro a partir del segundo tercio de la campaña: ganaron 34 de sus siguientes 50 partidos, incluyendo nueve series consecutivas de cinco juegos hasta lograr la clasificación a los playoffs. Este martes, ante otra gran afición en el estadio Guillermón Moncada, los Leones de la Capital completaron la hazaña más increíble que hubiéramos pensado hace cuatro meses y nueve días: de estar en el último lugar de la tabla de posiciones, discutirán el título nacional en estos playoffs tras vencer por 3-1 a las Avispas de Santiago de Cuba en el Juego 7 de la Semifinal.
¿Quién podía predecirlo, sobre todo luego del inicio sombrío durante el primer tercio? ¡Pero así es el béisbol! Los Leones aprovecharon todas las oportunidades, lograron resurgir, y han ganado sus dos playoffs en siete partidos para comenzar a soñar en azul con el regreso a la Final después de 11 años.
Tras perder por 8-1 en el Juego 6, una de las principales claves de Industriales rumbo al éxito estaría en contralar a la ofensiva de las Avispas, y el diestro Raymond Figueredo no defraudó la confianza del equipo: lanzó seis entradas, dominando a sus últimos ocho oponentes, admitió apenas cuatro hits, una carrera limpia, propinó cinco ponches y concedió solo dos boletos.
En un duelo de pitcheo contra el veterano Alberto Bisset, Figueredo frenó el ímpetu de las Avispas, evitando que desplegaran su principal potencial: la velocidad en función de la ofensiva. Cada avería del pitcheo de Industriales en las derrotas ante Santiago de Cuba, fue superada este martes en el Juego 7:
—Batearon de 8-2 después de dos outs, comenzando de 5-0 hasta que el emergente William Mustelier (bateó por el octavo bate Orrely Ribeaux) conectó un sencillo al centerfield en el final del séptimo. Pero luego Frank Herrera ponchó a Maikol Poll.
—Las Avispas comenzaron cada inning con un out: esa tendencia los limitó para crear carreras durante todo el partido, y terminaron produciendo su única anotación por doble de Carlos Monier y sencillo de Euclides Pérez en el final del cuarto después de un out.
—Yoelquis Guibert (4-0) y Osday Silva (4-0) se fueron con cifra combinada de 8-0: Guibert falló uno de los turnos claves cuando bateó para double play con corredores en primera y segunda, cerrando el tercer inning. Y luego Industriales anotó la primera carrera en el inicio del cuarto capítulo. Abriendo el sexto, falló golpeando una línea contundente que capturó el intermedista Jorge Enrique Alomá. Por su parte, Osday se ponchó tras iniciar la parte baja del segundo inning, y luego fue retirado con tres elevados al centerfield. El último de esos fly outs fue con Francisco Martínez en la inicial, durante el final del octavo.
—José Luis Gutiérrez no encontró corredores en bases. He aquí otro punto positivo a favor de los Leones: Gutiérrez había bateado de 10-7 con corredores en circulación contra Industriales en esta Semifinal, lo cual ayudó a detonar el ataque de las Avispas siempre que los bateadores de la última tanda del lineup se embasaran. Pero esta vez Maikol Poll, quien entró este martes al Juego 7 con .435 OBP y un 40% de efectividad anotando carreras luego de llegar a bases, fue limitado de 3-0 con par de ponches (uno en el tercer inning ante Figueredo, y otro para cerrar el séptimo frente a Herrera).
Aun así, Gutiérrez hizo estragos cuando golpeó un sencillo al center y se robó la intermedia con un out en el final del tercer episodio. Sin embargo, tras el boleto a Martínez, Guibert entregó el rodado para doble matanza.
No hay dudas de que los bateadores claves del lineup santiaguero habían sido el leadoff José Luis Gutiérrez, Yoelquis Guibert, Osday Silva y Carlos Monier, quien respondió nuevamente como quinto bate, produciendo de 4-2 con un doble y la única anotada del equipo. Al ser dominado Guibert, quien promediaba apenas .227 en esta Semifinal, pero anotó en el 90% de las veces que entró en bases, las probabilidades de anotar carreras fueron reducidas por el pitcheo de los Leones. Para las Avispas, la presencia de Osday y Monier con corredores en bases fue crucial durante estos playoffs, y contra Industriales promediaban para .500 y .417 con corredores en posición anotadora, respectivamente.
Cuando el pitcheo toma el control del juego y la defensa realiza un trabajo impecable, el reto se hace más difícil para la ofensiva. En las tres victorias de Industriales durante los Juegos 1, 2 y 4, los lanzadores registraron promedio de 66% de strikes. En las derrotas, la tasa bajó casi un 10%, entre 56-57%. Contra el equipo más veloz —y reitero, ¡nuevo recordista con 22 bases robadas en un playoff!—, lanzar strikes es más que una prioridad, debido al peligro latente que genera la presencia de las Avispas sobre las almohadillas. Durante los Juegos 1 y 2, Industriales abrió la Semifinal con 14 ponches y cuatro boletos. Luego, registraron 16 ponches con 23 bases por bolas entre los Juegos 3 y 6.
Este martes en el decisivo Juego 7, el pitcheo de Industriales promedió 63% de strikes. ¿Y en qué derivó esa secuencia?: Los bateadores de las Avispas cerraron en el 57% de sus 34 viajes por el plato en conteos desfavorables. En 20 de sus 34 apariciones en home, el trío de Raymond Figueredo, Frank Herrera y Juan Xavier Peñalver se combinó para dejar al lineup santiaguero de 20-1 con siete ponches.
Una vez más, el manager Guillermo Carmona apostó por sus principales relevistas y la estrategia no le falló: tras la salida de calidad de Raymond con 81 pitcheos (el 62% fueron strikes), Frank Herrera tiró dos entradas donde admitió par de sencillos —también protagonizó una sensacional atrapada de espaldas al home para poner out a Marlon Serrano—, y Peñalver sentenció a las Avispas en el noveno inning, apuntándose su 15to salvamento en esta temporada.
Aunque Bisset fue sustituido en el inicio del quinto por Wilber Reyna, vale señalar que el pitcheo santiaguero volvió a realizar otro gran trabajo. Al final, la carrera de Industriales en el cuarto llegó por una pifia de Monier, quien no pudo atrapar un elevado de Yasmany Tomás a lo profundo del rightfield abriendo inning. Acto seguido, doble de Yasiel Santoya y boleto intencional llenaron las bases para Oscar Valdés, quien no mordió el lazo tenaz de Bisset y también caminó hacia la inicial, abriendo el marcador, 1-0.
Las Avispas parecían reaccionar durante la parte baja del cuarto capítulo tras producir el empate 1-1 con doble de Monier y sencillo de Euclides Pérez —sustituyó al intermedista Dasiel Sevila, quien salió del partido por lesión—, pero Marlon Serrano entregó un bounce a tercera y Orrely Ribeaux se ponchó. En la entrada siguiente, la velocidad de Ariel Hechevarría fue el punto de inflexión ofensivo que necesitaba Industriales. De vuelta como leadoff, Hechevarría se embasó con un toque de bola imposible de atrapar por Bisset, y luego anotó desde la inicial, remolcado por doble al center de Alberto Calderón.*
*Sí, aunque Guibert no pudo capturar el bounce en un primer intento, por la posición en que estaba y su condición de zurdo, era difícil detener a Hechevarría.
Después de dos outs, Tomás remolcó la tercera carrera con sencillo al left y, tan temprano como el inicio del quinto, se presentaba la decisión final del Juego 7 entre Leones y Avispas.
Viendo limitada su velocidad —colocaron solo tres corredores en posición anotadora luego de 35 apariciones al plato—, Santiago de Cuba no pudo remontar. La historia de 1999, al menos esta vez, no se repitió: rugió el león y, después de 11 años, los Industriales volverán a discutir el título nacional, enfrentando a partir del próximo sábado a los Leñadores de Las Tunas.